miércoles, 16 de noviembre de 2011

El fleco suelto del Nacionalismo.

El separatismo se revalorizó en España con el advenimiento de la Constitución de 1978. Para el que sea demasiado joven o simplemento no lo sepa, el sentimiento independentista/separatista en España es relativamente nuevo. Tiene apenas un siglo y emana del Desastre del noventa y ocho y de los movimientos románticos de finales del XIX. No obstante, lo que en tiempos fue un nacionalismo tímido, algo de andar por casa sin mayor importancia, fue cogiendo fuerza y velocidad de crucero. Se convirtió en una debacle durante la Segunda República y tras la independencia unilateral de Cataluña en mil novecientos treinta y cuatro paso a la cladestinidad, transformándose en un modo de vida para muchos que vieron aplastadas sus aspiraciones con el franquismo. 

Hoy en día, en España los nacionalismos independentistas periféricos, llamados así porque se localizan en las zonas limítrofes del país, siguen cosechando fracasos ante la imparable marcha del sentimiento nacional, que poco a poco se ha ido reimponiendo en la Historia. El nefasto gobierno que ahora acaba ha desmantelado esa progresión natural enervando los ánimos, calentando las juventudes separatistas y alentando la ruptura nacional mediante la modificaciónes, innecesarias, de los estatutos de las Comunidades Autónomas.

Nacionalismo, Acometida, Destrucción.

Antes de continuar quiero dejar claro que todo nacionalismo no español en España es independentista y que no se entiende de otra manera. No sirven los paños calientes. Un partido político que no quiera ser tildado de rompepatrias debería etiquetarse cómo partido regionalista, tal y cómo existe en Cantabria. Un partido regionalista lo es por su región, lucha por ella, pero en el amparo de la Constitución y dentro del Estado de Derecho sin aspiraciones soberanistas que entren en confrontación directa con estos principios emanados de la Carta Magna. En el lado contrario se encuentran partidos cómo los que asientan sus nobles en Cataluña, Pais Vasco o Galicia. 

Grupos independentistas que juegan con las prebendas que emanan de la Constitución y que se oponen a la idea nacional intentando establecerse por encima del Estado, aprovechando las leyes al efecto e intentado la ruptura nacional por sus propios intereses. Utilizan la bendita Constitución, al tiempo que se oponen a hacerla suya. Quizás en esto tenga mucho que ver la Ley Electoral y por supuesto la financiación autonómica. Ésta última desmesurada, descontrolada, excesiva y cómo ésta viéndose injustificada, pro cuanto se cierran hospitales mientras se destinan escándalosas partidas a la saca de los gurpos separatistas que defienden el "hecho diferencial" o seáse, el dialecto catalanil y el incomprensible, inaprendible e inutil vascuence.

Multiculturalidad hasta en la sopa, que es de Arco Iris.

España es un puzzle multicultural. Demasiado multicultural y despues de casi cuarenta años demasiado políticamente correcto. Tanto jode lo mucho cómo lo poco y el buenismo que se ha instalado en la Nación socava indefectiblemente sus cimientos. Ciertas maneras del Estado corresponden más a operaciones de imagen que inciden en esta corrección y que perjudican más que favorecen tanto a la Administración cómo al prestigio del País La Ley Electoral, basada en el sistema D´Hont está totalmente desfasada para un estado democrático totalmente desarrollado y esto ha hecho que desde la muerte del General Franco, los grupúsculos nacionalistas aposenten sus diputados y senadores aún cuando otros grupos políticos de caracter nacional han conseguido más votos en las urnas y quedan con menos representación.

Sin embargo, lo que no hace el Estado lo hacen los ciudadanos con su voto. Durante todos estos años de democracia, grupos nacionalistas han gobernado sin problemas en las regiones periféricas. Reductos demagógicos que bajo la bandera del nacionalismo moderado han llevado a cabo, una y otra vez, intentos de establecer una ruptura con el Estado y por ende con el resto del país. Su mejor baza era, paradójicamente la Dictadura de Franco. Ya que con ella eran justificables los intentos de soberanizar sus territorios. Habian visto aplastadas sus ideologías, sus costumbres y su idiomas. Era plenamente justificable huir de una nación hostil y dictatorial. habia que independizarse.

Pero se dice que no hay nada que el tiempo no cure. Y tras tantos años el pueblo, los ciudadanos de a pie estában viendo la verdadera realidad de las cosas. Franco murió, la Democracia se aplicó con éxito y la Constitucion, a pesar de tener ya varias décadas a sus espaldas siguía tan vigente y garante de libertades y derechos cómo lo era el dia que se elaboró. España era un estado moderno, integrado en una realidad supranacional cómo es la Unión Europea y con un crecimiento consistente a pesar de estos tiempos de crisis que a todos los paises están afectando por igual. El milagro Español siguiría su camino, logrando un desarrollo en poco menos de treinta años que otros paises mucho más avanzados cómo Alemania, Francia o Inglaterra habían tardado siglos en conseguir.

Todo perfecto, de plena aplicación, cohesionando regiones hasta que llegó zETAparo. Ese ser totalmente talantoso que no ha servido más que para acabar con el superávit del Estado obtenido en el periodo mil novecientos noventa y seis- dosmil cuatro, fastidiar todo el poder del Estado y ponerle el mojino a la altura de violación a todos los enemigos de España, internos o externos. Hemos conseguido que a parte de tasas de independentismo cómo nunca se habían visto, los Estados  Unidos y Europa desconfíen plenamente de nosotros y pro supuesto, que la marca España se vea con recelo desde cualquier parte del mundo.

Finalmente...

El ciudadano no es tonto. Y esto deberian saberlo los políticos. A Rey muerto, Rey puesto. Los partidos nacionalistas nunca han sido necesarios, pero ahora, a varios años de distancia del Régimen es cuando verdaderamente se ven lo inútiles que son. El daño que han hecho a sus regiones intentando apartarles de una España que mira a todos sus hijos por igual. Debemos congratularnos por ello. Debemos felicitarnos porque España camina hacia una nueva realidad mas coherente, nacional y democrática. Un sistema que más tarde que temprano llegará al equilibrio que merece y que vió mermado por tantos años de dictadura, tanto de un general cómo de un nieto de repúblicano. Es lo que nos merecemos. Los nacionalismos están de más y eso, el pueblo, lo sabe.

Si deseas comunicarte conmigo, agregar algo a éste artículo, exponer tu opinión en privado o sugerirme temas sobre los que hablar no dudes en ponerte en contacto conmigo a través de churre_s_peinado@hotmail.com. Gracias.

6 comentarios:

candela dijo...

Ojalá tengas razón, pero no veo movimiento que haga pensar que se plantearía un cambio de la Ley Electoral a medio plazo, aunque eso sea lo único que puede salvar a España y protegerla de estos sectores nacionalistas marginales.

La multiculturalidad es otra estupidez, las culturas diferentes tienden a chocar y prevalece siempre la más fuerte. Estamos dando demasiadas alas al Islam CS..

María dijo...

Yo veo muy difícil la erradicación de esos nacionalismos radicales, lo veo por una cuestión muy simple, porque hay gente que ha hecho del nacionalismo su "modus vivendi" y, al igual que los terroristas viven como reyes de la extorsión, los nacionalistas (me refiero a los políticos) viven del sueldo que pagamos entre todos a base de arengar a los manejables.

Besos

Anónimo dijo...

Ojalá tengas razón.
Pero desgraciadamente al PSOE (como actual referente de la izquierda) le interesa y mucho tener a los nacionalistas; primero porque siempre preferirán tratar con el PSOE que con otro partido cualquiera español y segundo porque la representación nacionalista es de media tres veces mas importante en escaños que en votos reales.

Unknown dijo...

Pues ya sabes Candela, a hacer acopio de cartuchos y dos buenas escopetas, por si la primera falla. Primero se dispara y una vez deje de moverse, se pregunta. Sino nos comen por los píes.

Aún a riesgo de sonar un poco estúpido, los nazionalistas van teniendo su merecido, pues Pujol se queja de que nacen más Mohamé que Jordis. Al final si que van a ser independientes, pero cómo República Árabe Islámica.

Unknown dijo...

Eso es cierto María, pero el nazionalismo se nutre del dinero que saja a la sociedad y la sociedad, por ejemplo en Cataluña, está viendo que el barco se hunde mientras los nazionalistos se hinchan de dinero, lo utilizan en idioteces cómo sostener el dialecto o abrir embajadas en la que ondee la Senyera.

El pueblo quiere médicos, quiere profesores y quiere sanidad y servicios, no una élite de amomajados chupafondos dedicados a extorsionar con el "hecho diferencial".

Unknown dijo...

Por eso, Lobo, la gente le da la espalda al PS al mismo tiempo que CiU empieza aperder fuelle, el PNV encara sus peores resultados electorales y BNG se fue hace tiempo para ni volver.

Cosas veredes, dijo Don Quijote a Sáncho. Verdaderamente el pueblo está ya harto de que lo mangoneen aquellos que, por detrás y con nuestro dinero hacen, justamente, lo contrario a lo que nos imponen.

La basura al contenedor y en la bolsa toda esa murrialla que son nuestros politicástricos nazionalistas.

Darle Caña a ésto: