Todos sabemos y si no para eso está la mujer, el estado, el médico e internet, que fumar es una grandísima chorrada. Eso es así y no lo va a cambiar el hecho de falsearlo con vacuas excusas en las que mitigar la culpabilidad que supone ser fumador. Yo lo sé de buena tinta pues, hasta no hace demasiado padecí el tabaquismo en mis propias carnes. Hay quien empieza a fumar por dárselas de más interesante, por integrarse en un grupo o cómo yo, por una depresión por cosas que no vienen al caso. En su día no obstante, fueron cientos sino miles, las ocasiones en las que antepuse mi voluntad al hecho de fumar, intentando dejarlo. Pero suponía un placer meritorio que no podía dejar de lado. Me decía a mi mismo que necesitaba la nicotina para poner en orden mis ideas ya que estaban por ahí, a la buena maría, sin sujetarse al orden que yo les marcaba por el mero hecho de andar necesitado del fumeque.
Era una muy mala excusa para justificar el consumo de nicotina, cómo modo de disolver mis inquietudes, el hacinamiento de alquitran retrancando mis pulmones y derivados benzenoícos y demás mierda envenenando de manera constante e inevitable mi organismo. Así era. El que fuma es porque lo necesita. El fumar es una serpiente que se va mordiendo la cola. Sabes que te está matando, sino por una insuficiencía respiratoría por un cáncer colosal. Pero te justificas en que de algo hay que morir. El que fuma lo hace porque empezó sin ser consciente de lo pegajoso que podía resultar y ahora no hay quien lo pare. Es un veneno pegajoso e inevitable y además se rié de tí cuando lo intentas dejar, enganchándote aún más cuando lo intentas dejar y en un momento dado flaqueas.Yo intenté parar en seco y me reenganché, a peor. Intente parar poco a poco merced a los chicles de nicotina y nada, al final fumaba el doble de cigarrillos. Al final, cómo método tajante y experimental, me pasé a la pipa.
Así, pueden preguntarse a que viene esta perorata. Si ya no fumo ¿Por qué relato ésto? Pues precisamente por eso, por que resolví, en su totalidad, mi problema de tabaquismo. Cuando la adopté de amiga inseparable de vicios me dí cuaneta que eran varias las razones. La primera y así, la principal porque es tabaco puro y duro. Sin aditivos. Picadura de tabaco limpia de sustancias que en los cigarrillos se encuentran incluidas en el papel y la boquilla. Sabe y es tabaco sin tratar, tal y cómo sale de la planta y se presenta en su desecamiento. Sabe a esa hoja que Colón nos trajo convirtiéndonos en adictos y no a basura. A ese cuerno quemado que nos incluyen en los paquetes de veinte que bajo el sello de su Graciosa majestad y con el timbre del Ministerio de hacienda nos malvenden, cada vez a más precio de oro, en los estancos. Podría haber fumado puros, que tambien me gustan, pero no esta la economia como para tirar cohetes y la verdad, como en el alcohol, en el tabaco tambien hay garrafón. Y además, es patético ver cómo tras los repuntes en el precio de las labores unos y otrosmalvende su salud a través de esas maquinillas, picadura y papel de arroz con la que adormecen su locura.
Otra razón por la que fumaba en pipa es por el ahorro. Tal y cómo ahora los adictos al geranio se gastan los cuartos en una picadura enana e inculsa so lo hice por ahorrar. Si, señores. Por ahorrar. Si un paquete de veinte cigarrillos pesa veinte gramos y te dura medio dia y un paquete de picadura pesa cincuenta y te dura una semana o incluso más, ¿A que sale una cuenta redonda? Un paquete de picadura me costaba unos tres euros cincuenta, casi lo mismo que un paquete del tabaco de mayor consumo. Es mas redondo que un euro, sin abollones claro.Además, la ventaja que tiene la pipa es que nadie te pide tabaco. Tú si lo puedes hacer. Con la coña de que tardas mucho en prepararla, si estas en el tajo o metido en algun fregadete que no te deja mucho tiempo libre siempre puedes sablear a algún compañero aunque al segundo caes en que no te sale a cuenta. El tabaco liado sabe a cuernos quemados cuando te has acostumbrado a la picadura. Es ley de vida.
A parte fumas mucho menos. Un cigarrillo lo coges, lo prendes y te lo fumas. La pipa tienes que cargarla, prensar el tabaco y encenderlo. Cuando la has limpiado y preparado a pasado la hora del bocata y te tienes que ir de nuevo a currar. Te quedas sin fumar y eso, a la larga, el cuerpo lo nota. Muchas ventajas y solo una desventaja, es un puro coñazo y te hace viejísimo.De todas maneras a mi eso me importa un rábano. Quiero fumar, pero no quiero morir de cáncer. La solución es fumar menos. Ni chicles de nicotina ni ostias. Una buena pipa y a tirar para adelante que el mundo se acaba.
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