domingo, 23 de septiembre de 2012

Un concepto puertorriqueño.

Foto de Internet. Nunca Madre e hija estuvieron tan cerca.
Cuando comencé con el blog, hace unos años, de manos de mi mentor ya fallecido en ésto de la blosgofera, José Ramón Morales, mi idea no se alejaba mucho de la actual. El tema con el que él comenzó a escribir fue la opción hipotética de lograr una Cuba Democrática en el seno de una España autonómica. El tiempo nos está demostrando que lo segundo está en declive, pues nuestras autonomías están deviniendo, en el mejor de los casos, en un pozo de corrupción de cuyo fondo no es fácil saber o vislumbrar. En cuanto a lo primero, yo nunca dejé de creer en la posibilidad de que la Cuba que tanto deseaba Jose Ramón ver libre y española lo fuera, pero no cómo autonomía, sino cómo una región con varias provincias, de igual modo que nunca dejé de incluir en ese paquete a Puerto Rico, Filipinas y Guam, a la sazón y por derecho propio, territorios españoles en ultramar con los mismos derechos, obligaciones y calificación que cualquier región española.


La llave de América.

Durante cuatro siglos, Puerto Rico fue la llave de América. Era la primera tierra a arribar desde Cádiz y la última antes de dejar las Américas. En esa tesitura, mi amor por la pequeña Isla de Sotavento, la más pequeña de las Grandes Antillas Españolas, siempre me llevó a saber más de ella y a sentir cómo mía la tristeza que produjo el día que el Morro dejó de ser español para ser estadounidense.  Aún así, siempre quedó una esperanza de retorno, pues Puerto Rico se mantuvo cómo estado libre asociado del Gigante norteamericano en lugar de ser incorporado cómo un Estado de la Unión. El problema es el subsidiamiento en que la isla está inmersa y que hace que Washington tenga que inyectar innumerables fondos para costear prestaciones a una gran parte de la población en paro a resultas de tener una isla cómo un inmenso polígono de tiro de la Navy y cómo retiro de americanazos jubilados que pasan de Florida (a la sazón casi española también).

Aún así, a pesar del polígono de tiro naval de Vieques o de la gran antena del S.E.T.I. en Arecibo, la inmensidad de una minúscula isla cómo es Puerto Rico, transciende su pequeñez territorial. Puerto Rico es un compedio hispánico en una islita que recibe al visitante con toda la alegría que permiten sus raices españolas y africanas. Cierto es que la penetración de su vecino y técnicamente amo del norte es cada vez mayor, pero Puerto rico tiene la fuerza de mantenerse incólume ante el sajón y capaz de, junto a sus hermanos cubanos, convertir el sur de la Unión en un feudo castellanoparlante que horrorizaría a nuestros entrañables nazimbéciles catalanes y vascos. Puerto Rico es un trocito de España que ha sido precisamente eso, España, durante muchos más siglos que Puerto Rico cómo estado libre independiente, cómo parte de la federación estadounidense o cómo cualquier otra cosa que nos quieran vender. Cuando Washintong fue proclamado primer presidente, San Felipe del Morro ya sentía penetrar la humedad de décadas en sus muros.

Las otras Españas.

España, vencida y vilipendiada, con una crisis de identidad total, cedió la soberanía de sus joyas caribeñas sin pedir que se respetaran haciendas, nacionalidades o personas. Simplemente, el veinticinco de Julio Puerto Rico dejó de ser española, en libros, para ser española en lo universal. Cualquier puertorriqueño debería poder reclamar su nacionalidad española en base a sus ancestros. De igual modo que el gobierno lo hizo con Cuba. España no debería nunca olvidar que tuvo un Imperio y que, los mismo que sustrajo sus riquezas para mantener las guerras europeas, contrajo una serie de obligaciones entre las cuales, la primera y principal, es reconocer que allí no sólo dejó un territorio, sino cientos de miles de personas que, por filiación o familia nacieron españolas y que por tanto, tienen todo el derecho a ver reconocida su condición por la que un día fue su Metrópoli. Puerto Rico, cómo Cuba, Filipinas, Guam, las Marianas o las Marquesas tienen todo el derecho a verse reconocidas por los que siguen siendo parte de su alma, España.

Muchas veces pienso en lo sobrecogedor que debía ser entrar en el viejo San Juan pasando en un bajel de vela bajo la portentosa y amenazante figura del Morro, justo por encima de la cadena que servía para cerrar la bahía a los buques enemigos. Puerto Rico se reconoce por sus garitas, su símbolo nacional, ese que todos asociamos con la isla y que en su día sirvió para que soldados españoles, quizás autóctonos de la isla pero de descendencia de un pueblo de Badajoz, quizás nacidos en la misma Cuenca, vigilaran en lontananza y vieran arribar y partir buques patrios, pesqueros y ponerse cientos de miles de veces el sol tras la línea azul del Caribe. España quedaba tan lejos cómo pueda quedar hoy Ponce de San Juan, pues en el alma, españoles y portorriqueños sólo distaban el uno del otro un brazo de mar, la esencia era la misma a un lado y al otro del Atlántico porque la hidalguía de una recaló en la otra para después expandirse para todas las américas.

CSPeinado y Puerto Rico.

En mi labor de comunicador a través de mi modesto blog no quiero dejar de pasar la oportunidad de tender puentes, en la medida de lo posible, con todos los hispanistas, que los hay y muy buenos y entregados, en todas aquellas partes del mundo en las que hoyó el pie de un español. Es cierto que el trabajo es tan inmenso cómo persona que sigue teniendo la llamita rojigualda en el alma, pero también es cierto que, puesto que sólo pasamos una vez por éste mundo, merece la pena darlo todo por unir más que separar, en éstos tiempos inciertos en que el capitalismo hace aguas, España se ha rebelado cómo el ricacho de píes de barro y nos merecería mucho más la pena empezar a mirar por donde se nos ponía el sol tras cuajarse un viaje por encima de territorio español que seguir mirando al norte de los Pirineos, por donde se nos va el dinero y la salud. Ya lo hice en su día con México, ahora toca nuestra querida islita de verde selva y calido acento español. Bienvenido a CSPeinado mi querido Borinquen.

Si deseas comunicarte conmigo, agregar algo a éste artículo, exponer tu opinión en privado o sugerirme temas sobre los que hablar no dudes en ponerte en contacto conmigo a través de churre_s_peinado@hotmail.com. Gracias.

20 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno y emocional artículo sobre las excolonias pobladas de españoles puros aún hoy.

Conozco a portorriqueños que vieven en mi tierra y a sus casas las rotulan con el nombre de "Borinquen".

Saludos cordiales

Leona catalana dijo...

Nostalgía de lo que fue. Sueños perdidos allende los mares.

Triste.

Norma dijo...

Muy bien gracias por tu exposición, siempre nos enseña.
Gracias.

El Fugitivo dijo...

Tienes mucha razón en lo que dices. Y son nobles deseos de unidad, en una España que se desmigaja por dentro...

Y ahora que se conmemora la Constitucióm de Cádiz, no está de más recordar que en su elaboración participaron ponentes de las provincias españolas de Ultramar, lo que ahora se denominan las antiguas colonias americanas.

Un abrazo y FugisaludoS

Herep dijo...

Este tipo de entradas en las que se recuerda el legado español en ultramar es lo que nos hace falta en estos momentos, CS.
Pedagogía hispánica.
Explicar qué es lo que hicieron los españoles en pro de la Historia Universal hoy que todo son ataques contra nuestra nación e intentos burdos por reducirla a algo residual que debe ser desterrado de nuestras conciencias.

Un abrazo.

El último de Filipinas dijo...

Y habría que añadir el creciente de portugueses favorables a una futura unión con España.

José Luis Valladares Fernández dijo...

Una pena, pero ese imperio es ya agua pasada. Desearles únicamente prosperidad y libertad para todas esas antiguas tierras españolas.
Y a parte pedir que venga alguien que nos arregle esta torre de babel que tenemos aquí en el solar patrio.
Un abrazo

Rafa Hernández dijo...

Tuvimos mucho y lo perdimos todo, aunque creo que también se pretendió abarcar demasiado. Ahora lo que tenemos que procurar es que lo que nos queda no se vaya a la mierda, y esto desde luego no pinta para nada bien.

Saludos C.S Peinado.

Doramas dijo...

Si volviéramos a un poder centralista, todas las autonomías volverían a ser Regiones y en ese momento se debería permitir a todos esos países que se revelaron contra España, y ahí tienen lo que han conseguido, se volvieran a unir a su verdadera madre "ESPAÑA".

MAMUMA dijo...

¿ Terminaremos con unos nuevos reinos de Taifas?

Unknown dijo...

Javier, he tenido la oportunidad de ir conociendo tanto Cubanos cómo puertorriqueños que me han expresados su querencia por España mucho más allá de la simple simpatía al compartir lengua y raices. Lástima que los gobiernos vayan siempre a un paso distinto al de los pueblos.

Unknown dijo...

Leona, no pretendo dar muestras de nostálgico, sino mostrar una realidad que existe y es por pie propio. La existencia de un espíritu hispánico más aferrado en lugares que ya no son España y que contrasta fuertemente con los existentes en algunos lugares del suelo patrio.

Unknown dijo...

Norma, gracias a tí por leerme, no sabes cuanto anima que a alguien del Nuevo Mundo le agraden los textos que sobre el mismo expongo, un besazo.

Unknown dijo...

El Fugitivo, Puerto Rico es el caso más sangrante de aquella guerra que enfrentó al enfermo y viejo león Español con la joven águila estadounidense. Privados de su nacionalidad, convertidos en un estado satélite con todas las obligaciones y muy pocos derechos salvo el de prestar vidas y haciendas para la causa imperialista. Aún así, la resistencia portorriqueña ha sido objeto de admiración y hoy, cómo en 1898, se sigue hablando y sintiendo en español, recordemos, por la única voluntad del pueblo borinqueño.

Unknown dijo...

Herep, ya conoces mi forma de pensar y que mi parecer es que hay que ir refrescando todas estas cositas en la creencia de que hay Historia más allá de la Guerra que perdieron las izquierdas. Seamos francos, todo nuestro perjuicio viene de la Mayoría Absoluta en la que Gónzalez decidió que el Pueblo era de izquierdas, que España era soviética y que la masonería, el comunismo y todos los enemigos de España tenían, bajo su manga, barra libre. Así que habrá que luchar contra la estulticia de todos los que, de alguna manera u otra, siguen creyendo que no hay vida más allá del dieciocho de Julio.

Unknown dijo...

El último, una excelente noticia que sin embargo se ve opacada por el desinterés de ambos gobiernos. Poco a poco voy llegando a la conclusión de que lo que haya que hacer, lo debe de hacer el pueblo soberano y para de contar.

Unknown dijo...

Jose Luis, las cosas se arreglan con un pico y una pala, quejándose menos y apretando más el culo a la hora de trabajar. De todos modos yo creo en el acercamiento entre españoles, aunque sea a través de los mares y de los tiempos.

Anónimo dijo...

SE HA ABIERTO UN NUEVO BLOG SOBRE EL TEMA DE CUBA ESPAÑOLA. DEBIERAS UNIRTE, TE NECESITAMOS: http://referendumparacubaya.blogspot.com/

StefinySugar dijo...

Muy bonito todo pero si llegas a venir a Puerto Rico creo que te desilucionas un pelin.Si le tenemos mucho amor a España inclusive le llamamos ''La madre patria'' y ultimamente se estan utilizando palabras de por alla que antes no usamos, por ejemplo cambiamos nuestro ''Ay mi madre!'' por su ''madre mia'' pero la influencia de USA es fuerte y mas por el lavado de cerebro que quiere hacer el gobierno estadista, o los que quieren seguir siendo colonia, los independentistas son muy muy muy pocos, y pues asi nos va.Saludos y un abrazo y un beso desde Puerto Rico la isla canaria del caribe.


p.s perdona los errores ortograficos

Unknown dijo...

StefinySugar, la voluntad inmensa de que Puerto Rico sea de nuevo parte de España, no cómo colonia, sino cómo parte tan igualitaria cómo las Canarias hara superar, en el tiempo, la desidia de la administración norteamericana hacía una isla que no desea que sea parte de la Unión y que parece mantener sólo por tener una colonia donde poder jubilarse más de un retirado de la Navy.

Darle Caña a ésto: